Cómo inventar y sostener a un ser invisible
Vamos, que el asunto no es fácil. Curas, monjas , teólogos y sus jefes deben habérselas con un ser invisible, inevidente, indemostrable.
Esto obliga a empezar el camino por el segundo paso, es decir, dando por ya creado al Sujeto infinitamente idiota, o cruel, o ambos, al que se inventaron en el paso uno. Se entiende mejor con un ejemplo.
Dios no podría ser un unicornio rosa, porque un unicornio es un ser derivado de otros conceptos, un integrante de una especie, por raro que parezca. Un unicornio necesita padres unicornios, por ejemplo. Incluso el caballo homosexual de las montañas tuvo unos padres, por definición.
Dios es el que es, aquel cuya esencia coincide con su existencia. Incienso. Echad incienso.
Obviamente, un ser sin origen que no necesita explicación es pensable. Es más , suena más serio que el unicornio rosa y el caballo homosexual de las montañas.
Sin embargo, es inexistente. No saldrá en defensa del creyente cuando no sepa que decir, no es el que te tira al suelo si vas a los carismáticos. Te dejará solo en la tormenta, te dejará morir. Lo mismo harán todos los dioses, todos. La imaginación del ser humano no te ayudará en esto.
El problema no es como resuelven los dioses el asunto del mal. El problema es que ya plantearse como es posible que haya un dios omnipotente y benévolo si hay mal es una trampa de la mente. Cuando piensas así ya estás en la p... Misa de once. Pregúntale al padre Anselmo después de misa, ahora a rezar y a comerse a los dioses.
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